Podología Infantil

Podemos pensar que un niño hasta que no camine no va a necesitar la ayuda de un Podólogo, cada vez existe más evidencia científica que certifica de la importancia de las fases del desarrollo del preandante desde el parto, pasando por la fase de sedestación, gateo, el inicio de la bipedestación y deambulación.

Cada una de estas fases depende de un Sistema de Control de Reflejos con los cuales nacemos,  que nos permiten defendernos  y relacionarnos con el medio que nos rodea.

Estos reflejos, deben de ir integrándose a lo largo del desarrollo del bebe, en caso contrario quedarían activos produciendo patrones anormales de movimiento, cómo puede ser la marcha de puntillas por la persistencia del reflejo nucal de extensión, el cual se activa en el canal del parto en el momento del nacimiento. 

¿Es importante que mi bebe gatee? ¿Cuándo debe de empezar a caminar?

Cada una de las fases de desarrollo son importantes a nivel de coordinación e integración de movimientos que quedarán plasmados en la forma de caminar.

En muchos casos hay niños que se les ve más patosos, que son incapaces de jugar al fútbol por ejemplo… y pudiera ser por un fallo de coordinación.

¿Cuándo se instaura la forma definitiva de caminar de un niño?

La marcha pasa por diferentes fases, y es un proceso cambiante a lo largo de toda la vida.

Al inicio se pasa por una fase varoide (piernas arqueadas), que posteriormente se compensa con el movimiento contrario hasta aproximadamente los 6 años que se obtiene, entre comillas, la forma más parecida a la definitiva y todo esto conlleva un desarrollo a nivel de torsión y carga osea totalmente dependiente de estas fases.

Por ello, si esperamos a que el niño crezca, probablemente lleguemos tarde para realizar las correcciones oportunas.