Cada vez vamos conociendo más y mejor los síntomas que nos puede producir la infección por COVID, y las secuelas que nos pueden quedar tras pasar la enfermedad.
Además de los síntomas más comunes que sabemos como tos, fiebre, dificultad respiratoria hay muchos otros que nos pueden alertar, especialmente en casos asintomáticos.
Se ha demostrado que el virus afecta a la circulación sanguínea produciéndose microcoágulos de los capilares de los dedos de manos y pies.
Aparecen zonas enrojecidas, incluso amoratadas de la piel, sobre todo a nivel distal cerca de las uñas, a veces se pueden confundir con los tradicionales “sabañones” causados por el frío.
En la mayoría de los casos no se acompañan de síntomas generales como fiebre y demás, en muchos casos el paciente es asintomático, por tanto es importante tenerlo en cuenta porque nos pueden servir como medio diagnóstico.
Recalcati S. Cutaneous manifestations in COVID-19: a first perspective. J Eur Acad Dermatol Venereol. 2020 May;34(5):e212-e213.
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